Las ausencias

Olga Puertas

Es lamentable que todavía hoy no sepamos el número de fallecidos por la Covid-19. ¿50 mil, 60 mil al final de año? Según criterios cambiantes, que ni el señor Simón acierta a explicarnos -solo el INE, el Registro civil y las funerarias-, convergen sus cifras para dar la razón a expertos extranjeros que la gestión de la pandemia es de las más desastrosas de Europa.

A finales de junio en Sant Boi teníamos 1.085 infectados, éramos líderes en la comarca, seguidos de Cornellà de Llobregat con 991, siempre juntos en las desgracias. Aunque todo lo asumimos, hay días con tanto trasiego fúnebre que es difícil aparcar en el tanatorio. La sindemia relaciona los indicadores socioeconómicos bajos con más muertos.

Pasaré a otra variante de la segunda ola del virus, el nuevo curso escolar se mantiene a trancas y barrancas. El precio: 160 alumnos infectados y 18 profesores contagiados en nuestro parque escolar.

Mientras tanto los responsables locales de Educación, se resisten a crear un soporte educativo en Ràdio Sant Boi para los afectados, que podrán ser muchos, dados los rebrotes víricos. Diré que Ràdio Sant Boi es un lujo para una ciudad pobre con fracaso escolar y no se esfuerza en autojustificar su utilidad social, con la desolación sanitaria y económica de nuestra ciudad; sino que emite publicidad y un discutido programa taurino para una audiencia no santboiana, mayormente.

Se acerca una Navidad triste, añorando los ausentes y que, dada la confusión de normas e interpretaciones, puede ser fuente de nuevos contagios.

Pero dado que el instinto de sobrevivir es fortísimo en todos, recomendaré a nuestro gobierno local que haga lo que muchos hacemos desde la pandemia: miramos nuestros armarios, mejoramos nuestras viviendas y reutilizamos nuestro vestuario, procurando un ahorro para emergencias y apretamos los dientes para seguir ayudando a los nuestros.

Así pues, creo que llegado el momento de la austeridad en lo superfluo e invertir en lo necesario. ¿Tenemos un plan de inversiones con los fondos de la Unión Europea en Sant Boi o llegaremos tarde como de costumbre? ¿La balsa de riego, la EDAR inactiva e incluso el agonizante “Mercat de Flors”, son inversiones útiles con fondos europeos? Viladecans y otros vecinos han hecho ya sus nuevos proyectos UE. ¿Y Sant Boi?

El teletrabajo municipal ¿cumple su nivel de productividad anterior o se acepta inferior? Dada su novedad y la cifra de absentismo (9% anual) que ahora debe haber aumentado. Al final, ¿debemos aumentar la plantilla back-office? Mejor becas y voluntariado FP. El gasto fijo municipal es casi la mitad del presupuesto anual. ¿Habrá un presupuesto y un convenio adecuados a la pandemia?

Soy animalista, pero no mascotista. ¿Debemos aumentar recursos  a refugios y colonias? cuando muchos de nuestros niños tienen déficits proteínicos y sus padres penan en las colas del Banc de Aliments. ¿Qué Navidad les espera a todos ellos? Primun vivere, pues eso, dejemos las grescas y subvenciones a entidades sin actividad y reasignemos sus fondos a las necesidades primarias de nuestras gentes.

Que no le pase a nuestro ayuntamiento como con el monumento al Doctor Pujadas, fundador del primer manicomio en 1854 de España. La comisión para hacerlo no se reunió nunca. Pujadas, un filántropo, está ausente en su ciudad.

Olga Puertas és regidora no adscrita a l’Ajuntament de Sant Boi.

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