La feria del libro se llena de santboianos durante el día de Sant Jordi. Rosas, libros y mucho amor han convertido la rambla Rafael Casanova en el lugar más frecuentado de la ciudad durante el 23 de abril. En esta edición ha habido dos paradas menos de libros debido al cese de negocios.
Libros y rosas llenan Sant Boi el dia de Sant Jordi // Elisenda Colell
Sant Jordi llena Sant Boi de rosas y cultura en la Feria del Libro, ubicada en la rambla Rafael Casanova. Parejas, padres e hijos y hasta los más pequeños de la casa no se han perdido la ocasión de hojear libros de las cinco librerías que han puesto sus paradas en la calle para celebrar la diada. Desde las librerías aseguran que año tras año el número de asistentes no para de crecer, y si la primavera estalla el 23 de abril, como ha pasado este año, la rambla se convierte en el espacio perfecto parar celebrar el día de Sant Jordi en la ciudad.
El propietario de la librería Isart, Jaume Isart, considera que «cada año asisten más personas a la feria». Las librerías preguntadas por dSantBoi aseguran que este año las vendas han crecido. Quizás se deba a que este año había dos paradas de libros menos que el año pasado ya que han cerrado sus negocios. Según la propietaria de la librería Barbús, María Cribero, el ambiente ha sido «mejor» y se han vendido «más libros». Croquis, Les Hores i Petita Koreander han completado la oferta literaria de negocios locales. El buen tiempo ha ayudado a que las rosas y los libros no tuvieran rival durante toda la jornada.
Los libros más vendidos han sido los que con más repercusión mediática han contado. En catalán destaca el relato de Xavier Bosch Ningú com tu, ganador del premio Ramon Llull, y en lengua castellana el más buscado en la ciudad ha sido la obra de Arturo Pérez Reverte Hombre buenos. También han estado presentes en la plaza algunas paradas que vendían libros antiguos de segunda mano a precios muy reducidos. Quién no ha salido con una lectura entre brazos ha sido porqué no ha querido.
Cuenta la leyenda que Sant Jordi regaló una rosa a su princesa después de matar al dragón. Ahora la tradición ha evolucionado en Sant Boi. Muchas chicas han llevado sus rosas bajo el brazo, pero otras han preferido comprársela ellas mismas. La flor, la otra gran protagonista de la diada, ha estado muy presente en la ciudad. Ya sea de color rojo vivo, con una espina de acompañante, o también en múltiples formatos. Rosas de tela, de cápsulas de café, o también en distintos colores han sido otro polo de atracción. Sin embargo la dependienta de la floristería Les Flors, Mari Tomé, ha recalcado que «la gente no escatima en precio, quiere presentación», un formato que sigue ganando adeptos.
Una parada de rosas, en la rambla Rafael Casanova // Elisenda Colell
Durante el día, diversos escritores locales han firmado sus obras más recientes en la feria, como por ejemplo Raquel Gu, autora de Dracàlec: un decàleg per a dracs i dragones. En total, 18 autores locales han participado en el Sant Jordi de este año firmando sus libros en la carpa creada específicamente para ello y en las paradas de las librerías.
Distintas entidades sociales como Retalls d’Art o el Esplai Arrels, entre otros, y numerosos partidos políticos a un mes de las elecciones municipales, no se han perdido la oportunidad de hacer difusión y llegar a la ciudadanía. Una de las más destacadas ha sido la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), que en su parada ha puesto a la venta unas rosas manuales del color que tiñe su lucha, el verde. Otro ejemplo son las diversas asociaciones solidarias dedicadas a la cooperación con el tercer mundo, que se han agrupado en una única carpa vendiendo rosas y productos que ayudan a financiar sus proyectos sociales. También las rosas de Tots som santboians han estado presentes en la jornada. Los beneficios que obtenga esta entidad sin ánimo de lucro se van a destinar a que las personas con discapacidad mental puedan disfrutar de un espacio de ocio.
Des del ayuntamiento se han organizado numerosas actividades durante toda la jornada. Talleres de rosas solidarias, espectáculos de cuenta cuentos, un encuentro de sardanas y hasta las puertas del consistorio se han abierto para todos los visitantes. En total, más de 400 personas han visitado las dependencias municipales en turnos de mñana y de tarde en visitas guiadas que contaban con la colaboración de personal del ayuntamiento.
En el marco de la celebración de Sant Jordi también se ha celebrado la entrega de premios del Concurso Literario y de Carteles en el que han participado alumnos de los institutos públicos de la ciudad y de la escuela Joan Bardina. Se han entregado un total de 21 premios en lengua catalana y dos menciones honoríficas, 18 premios en lengua castellana y dos menciones honoríficas, 9 premios de lenguas extranjera con dos menciones en francés y alemán y, finalmente, 9 premios del concurso de carteles de Sant Jordi. Al acto han asistido unas 250 personas.