Tras las elecciones municipales del 26 de mayo de 2019 y el arranque de la presente legislatura, me gustaría hacer algunas reflexiones, tanto sobre el equipo de gobiern,o como sobre los resultados y los grupos municipales producto de ellos.
En primer lugar, hay que felicitar, evidentemente, al Partit Socialista de Catalunya por sus excelentes resultados, no sólo revalida su labor de gobierno, sino que los santboianos y santboianas le dan la mayoría absoluta, como demócrata (y ácrata) no puedo por menos que felicitar por ello al PSC y a la compañera Lluïsa Moret. Los 13 escaños del PSC le permitirían -si lo desease- gobernar en solitario, aunque no haya hecho eso, es obvio que sólo dependerá de sí mismo sin necesitar socio alguno para validar sus decisiones, así que evidentemente el acuerdo alcanzado con Sant Boi en Comú obedece a otros motivos -confianza en algunas personas, en su capacidad o labor realizada, acuerdos preelectorales, entre otras posibles causas-.
Aunque formalmente se haya producido este cambio -la mayoría absoluta del PSC- que afecta a los partidos, lo cierto es que si se analiza un poco el tema se ve que los cambios, respecto al equipo de gobierno entendido como tal, son mínimos. Si en la pasada legislatura lo componían 14 regidores en la actual lo forman 15, vaya, uno más, por lo cual los cambios son más aparentes que reales en ese aspecto.
Como el anterior pacto de gobierno -y, de hecho, en los últimos decenios- ha sido de una placidez absoluta para el PSC -al punto que me permití calificar durante la campaña, porque creo que refleja la realidad, a la candidatura del PSC como la candidatura “a” del equipo de gobierno y a la de ICV (Sant Boi en Comú) como la “b” del equipo de gobierno- y para nada ha tenido que discutir con sus socios pues… nada cambiará en el presente gobierno, lo que a mi entender ratifica que, en Sant Boi, ambas formaciones se han simbiotizado hasta el punto de ser una misma cosa -haciendo un poco de política-ficción podría suponerse un grupo llamado “PSC-En Comú Verds”, constituyendo hipotéticamente eso formalmente no se alejaría demasiado de la realidad, tal vez, lo que más se aleje sea el nombre “En Comú”, que significa una cosa en Sant Boi y otra fuera del mismo -que sepamos Catalunya en Comú no se ha fusionado ni formalmente ni de hecho con el PSC, al menos por ahora-. Por todo ello creo que los resultados de las últimas elecciones, en lo que hace al equipo de gobierno, han arrojado cambios en la forma pero no en el fondo.
Ahora iré a analizar el resto de resultados. La segunda formación a felicitar es Esquerra Republicana de Catalunya, con un muy buen resultado que le permite aumentar en dos regidores su grupo municipal -pasando de tres a cinco- y los aupa a la primera fuerza de oposición. Hay que felicitar al compañero Miquel Salip porque si bien las circunstancias han favorecido a su formación -igual que al PSC- sin duda es mérito suyo haber sabido rentabilizarlas y capitalizarlas -lo mismo que en el caso del PSC es mérito de la compañera Lluïsa Moret-.
Después nos encontramos a la única formación de derechas que subsiste en el Ayuntamiento, Ciudadanos, creo que es mérito de Olga Puertas el conseguir mantener sus tres regidores pese a lo cual han bajado en número de votos. Con todo habrá que ver cómo evoluciona Ciudadanos en este mandato ya que la portavocía de este grupo pasa a ostentarla Lluis Tejedor, eso junto a la incorporación de Carles Campdepadrós -nuevo regidor de este grupo con Lluis Tejedor- nos plantea la incógnita de cuál será su actitud y funcionamiento. Con todo, repetimos, es el único grupo político de derechas con representación en el consistorio así que, al menos ideológicamente, es de prever un cierto aislamiento.
Llegamos a ICV (Sant Boi en Comú). Explicaré primero por qué uso como nombre principal el antiguo (y a punto de extinguirse formalmente por el concurso de acreedores que la formación sufre) y entre paréntesis pongo el nuevo. Es que… Sant Boi en Comú está formado en Sant Boi única y exclusivamente por ICV -como organización política, otra cosa es que junto a ella tenga simpatizantes que no militen en la misma-, así que hasta cierto punto es algo irónico que el nuevo nombre -”En Comú”- haga referencia a una comunidad de… uno -a diferencia de la anterior coalición, formada por ICV-EUiA-Mes-. Los compañeros de ICV (Sant Boi en Comú) han perdido dos regidores y obtenido 2.801 votos -si bien los resultados provisionales les daban 2.758-. Me temo que no puedo felicitarles porque no creo que su resultado les satisfaga. No discutiré cual ha sido su trabajo en el equipo de gobierno, es posible que haya sido adecuado o incluso bueno pero es evidente que los electores y las electoras entre la candidatura “a” (PSC) y “b” (ICV/Sant Boi en Comú) del equipo de gobierno ha optado por la “a”, tiene cierto sentido, si uno tiene el original y ya le gusta ¿para qué va a querer la copia? Son los riesgos de las simbiosis.
Ahora, ciertamente han renovado su acuerdo de gobierno, repetimos que aritméticamente no le hacía ninguna falta al PSC el hacerlo, es de suponer que entienden que políticamente sí la hace, hasta cierto punto la podríamos comprender si se quisiera algo así como un gobierno amplio de izquierdas -sería una estrategia inteligente por parte del PSC, entre otras cosas porque… obligaría a la izquierda fuera de su partido a corresponsabilizarse de las decisiones de gobierno y ésta, en puridad, no podría vetar nada ni impedir nada votando, otra cosa, tal vez, fuese negociando- pero se diría que lo único que se desea es reeditar el equipo de gobierno anterior, por lo cual entendemos que las formaciones de éste han sido y son una misma cosa, por eso… siguen siendo un mismo equipo de gobierno -al punto que ya ni siquiera es preciso hablar de candidaturas “a” y “b” del equipo de gobierno sino que basta con hablar de la candidatura “ab” del equipo de gobierno, teniendo en cuenta que “ab” en latín significa “de” cabría traducir la expresión por pura y simplemente “candidatura de equipo de gobierno”, esa es la realidad y no otra-.
Por último le toca a la candidatura que he encabezado, Podem-Esquerra Unitària. Primero agradecer a los santobianos y santboianas la confianza depositada en nosotros, plasmada en los 2.784 votos otorgados -los resultados provisionales nos daban 2.756-. Eso supone un empate técnico con ICV (Sant Boi en Comú) dado que una diferencia como la existente -sea de dos o de 17 votos- no puede calificarse de otra manera. Segundo entender esto como un punto de partida, no de llegada, pese a que no éramos exactamente nuevos y que habíamos realizado una labor en Gent de Sant Boi -yo mismo he tenido el honor y el placer de ser el portavoz de ese grupo municipal durante casi tres años- sí que era la primera vez que nos presentábamos con nuestra propia marca, lo cual siempre genera alguna incertidumbre. ¿Qué apoyos tendrás? ¿Te beneficiará o no? ¿Se reconocerá o no el trabajo realizado en la anterior confluencia? ¿Se reconocerá o no el trabajo no institucional? Bien, la respuesta de la población ha sido “sí” -no sé en qué grado a cada pregunta pero creo que ha sido “sí” a todas-.
Como he dicho hemos trabajado desde Gent de Sant Boi en la oposición durante cuatro años -casi tres estando quién escribe de regidor- y, pienso, que desde el punto de vista institucional hemos demostrado capacidad de diálogo y trabajo, entre un 75 y 80% de las mociones de nuestro grupo han sido aprobadas. Teniendo en cuenta que contábamos con dos regidores de 25 y que el equipo de gobierno tenía mayoría absoluta -como vuelve a tenerla- pienso que no es un mal balance. Después, por primera vez hemos podido usar nuestra marca -el nombre de nuestro partido- en unas elecciones municipales, no hemos hecho nada extraño ni aprovechado nada que no tuviesemos el derecho de aprovechar, nada se ha constituido “ex novo”, Podemos existe en Sant Boi desde el 2014, dada la forma peculiar en la que el partido nos permitió presentarnos en las elecciones municipales del 2015 lo hicimos dentro de la confluencia Gent de Sant Boi -y nada a disgusto, para quienes participamos en ese proyecto nos parecía un proyecto bueno e inclusivo y, su espíritu y la inclusividad del mismo se ha repetido en nuestra actual candidatura, dado que nos hemos presentado con un acuerdo político en confluencia con los compañeros de EUiA, a quienes debo agradecer su participación, su entusiasmo, su capacidad de trabajo y el compartir la misma idea de unidad popular como uno de nuestros objetivos políticos, lejos de pensar en ortodoxias endogámicas- y creo que el balance ha sido positivo y satisfactorio.
Gent de Sant Boi no continuó -por diferentes motivos- y de su formación surgieron dos candidaturas que reclamaban su “herencia”, la nuestra y la de los compañeros de “Guanyem”. Bien, los electores y electoras han hablado y se han pronunciado a favor nuestro, de hecho nuestros resultados son casi calcados a los obtenidos en 2015 por Gent de Sant Boi -2.768 en aquellas elecciones, luego algo más ahora- así que nos parece incuestionable la revalidación que se nos ha dado y el reconocimiento otorgado al trabajo realizado en dicha confluencia.
Por otro lado, también hemos demostrado que se puede enviar y hacer llegar un mensaje político sin necesidad de gastos enormes ni dispendios no sólo inútiles sino que, en numerosas ocasiones, acaban hipotecando a las organizaciones políticas con entidades financieras quedando muchas veces a su merced -y, lamentablemente, en algún caso llegando a la quiebra económica-. Entre Podemos y EUiA hemos gastado -a falta de hacer las cuentas finales y dando una cifra a la alta- un máximo de unos 2.500 euros y… aún nos parece demasiado -de hecho, mantenemos abierto el debate de qué hacer en futuras campañas para que el gasto sea menor y el coste de la campaña más sostenible todavía-.
Como se ha indicado nuestro espíritu es el mismo espíritu inclusivo que presidió la concepción y creación de Gent de Sant Boi, por eso creemos en la Unidad Popular -cuyos primeros pasos ya hemos dado en la misma confección de la candidatura y en la confluencia realizada con los compañeros y compañeras de EUiA, igualmente dado en el entendimiento con los compañeros y compañeras del Ateneo Libertario-, en ese sentido queremos realizar un auténtico proyecto en común -uno de verdad, no sólo un mero nombre- junto a otras organizaciones políticas, entidades, asociativas, vecinales y cualquier persona que a título individual desee participar en un proyecto que sólo puede ser colectivo.
Por eso tendemos nuestra mano a los compañeros y compañeras de “Guanyem” si desean participar en un auténtico frente amplio de izquierdas que represente no solo a la izquierda alternativa sino que configure una alternativa de izquierdas -una real, no una impostada- y también a otros compañeros -sea a nivel individual o como organización- de otras formaciones de izquierda. Por nuestra parte, además, desde el grupo municipal de Podem-Esquerra Unida i Alternativa ponemos nuestra labor institucional al servicio de nuestros vecinos y vecinas y esperamos mantener con ellos y ellas una fluida relación de intercambio. Si se me permite el juego de palabras no sólo Podemos… también queremos.
Jorge Romero Gil, portavoz del grupo municipal Podem-Esquerra Unida i Alternativa