Se inicia una nueva crisis económica y la mayoría de los políticos profesionales, ni la avisan, ni trabajan en dotarnos de presupuestos para afrontarla. Tanto en Madrid, como en Barcelona, los dos poderes de la plaça Sant Jaume, -la Generalitat de Torra y el Ayuntamiento de Colau-, hacen “política”, mucha “política”.
Esta triple carencia presupuestaria repercute en el pobre Sant Boi, donde los socialistas solo invierten 3,5 millones de euros al año de un total de nueve que necesitan para funcionar. Son cifras que después irán modificando a su albur; en lo básico, son partidas similares año tras año.
Los 40 años de dominio sociocomunista han convencido a unos dirigentes que empezaron jóvenes y ahora ya peinan canas de que son eternos e insustituibles. Tras este convencimiento, hay 2 millones de euros en subvenciones -gana votos- que en su mayor parte no están auditadas. También los planes de empleo semestrales y las empresas municipales son instrumentos de influencia electoral. El cuerpo técnico, con mucho cargo designado, no ejerce el necesario contrapeso sobre todo en los períodos preelectorales.
El declive de Sant Boi
Valoremos la economía local, un asunto clave que lleva muchos años, como nuestra zona industrial, débil, anticuada y sin atractivo inversor generador de empleo. El equipo socialista se queja por turnos y envidia a sus vecinos socialistas o comunistas.
La que fue un suburbio de Sant Boi, (El Prat de Llobregat) es envidiada por sus ingresos de aeropuertos, puerto, Nissan…pero no le reconocen la mayor calidad de su cuerpo técnico, jurídico y todos sus pleitos, ganadores.
También cuenta con una mayor cantera de diputados y cargos públicos (‘lobbistas pratenses’) a lo largo de su historia. Tienen celos por la mayor renta media pratense y olvidan que el durante años barrio de S.Boi, tuvo malaria y miseria. Y ahora nos supera. Tienen hasta un Club Rotary.
En cuanto a Viladecans, su controvertido alcalde, que trabajó de “educador de calle” en Sant Boi nos conoce bien; los rechazo de S.Boi los recoge él. Si no quieren el ‘outlet’ y sus 400 empleos-, para nosotros; el bloqueo de hoteles de Colau, lo aprovecha él, no Sant Boi; su zona industrial bien equipada y ocupada supera a su vecina santobiana, mal dotada y semivacía. La renta de Viladecans supera a la de Sant Boi y encima tiene el ‘Atrium’, en el que hasta hacen ópera. Sant Boi tiene tres teatros en ruinas. Esa es la diferencia. Igual que un 15,2% de pobreza crónica.
Un Banco de Alimentos que da más de 5.000 raciones, un 12% de paro, alto fracaso y abandono escolar y 200 presos, con un 1,8% aumento de delitos. Viviendas okupadas unas, y otras vacías (2.808), pero sin vivienda suficiente cuando emergen las chabolas en algunas zonas. Con 160 desahucios al año. Somos los segundos más pobres de la comarca y tenemos una renta media por debajo de la española.
Su Parque Agrario está mutilado por vías, tuberías y cableados. Decae salvo para los grandes cultivadores. La fundación Desos, que pertenece al exalcalde Vila, es mimada con tierras y subvenciones, hasta el punto de pagarle multas de riego. Vila no milita, pero influye mucho sin estar ni en el preceptivo Registro de Intereses Municipal.
Solución posible
Auditar, revisar funcionamientos, suprimir chiringuitos sin interés social, usar el gran patrimonio inmobiliario y recortar todo gasto innecesario que una ciudad pobre no se puede permitir. Sonreír al inversor y modernizar toda la zona industrial, con comercios atractivos y suficientes hoteles. Acabar obras y permutar el Cuartel y la Central de Fecsa. Mejorar la FP. Al cambiar de equipo directivo, notarán mejoría.