Olga Puertas
Una de las mejores y más costosas escenas de “La La Land” es el embotellamiento de tráfico de los Ángeles, que junto con su contaminación y criminalidad son parte de las características de la gran urbe americana. En esta larga secuencia se aprecia la magnitud del caos circulatorio que ocurre allí a diario, dada la escasez de alternativas al coche. Sin embargo en S. Boi nos ocurre algo parecido cada día en la C-245 y si recordamos que las obras se iniciaron en 1992 con los Juegos Olímpicos, hablamos de un cuarto de siglo, período largo que abarca a casi dos generaciones de sanboyanos y un tiempo político: de 38 años de dominio socialista que se acerca ya a los 40 años franquistas o castristas; en todo caso un período excesivo para cualquier administrativista o incluso paraex-profesionales de la política municipal; porque tantos años favorecen el inmovilismo confortable en que caen los detentadores del poder.
Digo esto porque hace pocos meses el ministro Catalá de Fomento, hoy en Justicia, se declaraba dispuesto en S. Boi (obra FcSants-Prat) a entrevistarse con la alcaldía para acelerar las obras, paradas una vez más, con motivos o excusas diversas a lo largo de este cuarto de siglo último,-ya hemos dejado el S.XX sin acabarlas y porfiemos para que las acaben en el S.XXI-; tras reuniones con diversos entes -Diputación, Generalitat y con los diversos ayuntamientos afectados-, el Sr Urrecho, tan solo un director general, se ha venido a explicarnos que en Abril.17 reiniciarán una fase de los trabajos, valga decir que estos sí serán los que agudizarán más aún si cabe nuestras dificultades para entrar y salir de la ciudad. S.Boi tiene una acreditada fama de “piel gruesa” para aguantar las servidumbres de paso y las sajaduras territoriales de Cías de servicios públicos y de conceder fácil los derechos de paso para trenes, carreteras, tendidos eléctricos, tuberías y expropiaciones diversas, junto con la rectificación de lindes: todo ello sin conseguir nada a cambio. Tal vez esto explique que el ministro Serna (ingeniero de caminos) haya desmentido al anterior ministro Catalá (abogado) y nos haya “degradado” con la visita de su director general el Sr. Urrecho. Poco es en efecto para el desorden circulatorio que se nos agravará en los próximos meses, años tal vez…
Para tener una mejor perspectiva del problema, hagan como yo en mis paseos suban a la Muntanyeta y al caer la tarde cuando los cláxones suenan y las caravanas de coches avanzan lentamente por el puente del Llobregat se harán cargo del perjuicio económico que las obras nos supondrán por tiempo indefinido. También desde el mirador del Hotel “El Castillo” y la plaza de la iglesia se aprecia el drama humano que a diario significa la lentitud circulatoria : el llegar tarde, los expedientes disciplinarios acumulados y hasta el despido en muchos casos, conretrasos para las emergencias y un mayor coste de combustible, contaminación y más accidentes.
S.Boi tiene una alta rotación de altas y bajas censales (3.000 personas por año)esto tal vez se explique por sus malos accesos e insuficiente transporte público, junto con una población envejecida y baja demografía. Y un 14% de paro. Inquietante.
Por suerte en una plataforma de madera del ParcMuntanyeta, a la hora de los atascos de coches, jóvenes adolescentes se ponen música, hacen pasos de baile, y se fotografían, posando como RyanGosling y Emma Stone desde las alturas de Hollywood:cuando se consuelan de sus precarios empleos y alimentansus sueños mutuos de superación. Pura evasión en los nuestros o ¿No?
Olga Puertas, concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Sant Boi