Se cerró el 2016 a trancas y barrancas a nivel general; en lo político con acuerdos precarios e incertidumbres máximas (Referéndum ilegal bis, terrorismo yihadista y “Brexit”) y quise aliviarme en la esfera de lo pequeño, de lo municipal, en esta primera línea de la democracia. Y me surgió rápido una cifra: 37 años de mando socialista y comunista con algunas incorporaciones de CIU y ERC en breves coaliciones de supremacismo socialista, este era el resumen partidista para explicar ¿qué?
Que en S. Boi seguíamos estancados con temas pendientes de resolver desde 1964 cuando las oleadas de inmigrantes sureños llegaron a una adormecida ciudad de predominio agrícola con algunas fábricas y se instalaron en chabolas y viviendas autoconstruidas de forma precaria y rápida, dando pie hasta alguna tragedia.
Me recordaban esto; cuando en un pleno se votó una propuesta de -reordenación urbana para muchas de estas viviendas situadas en cotas altas de difícil acceso que habían sido malvendidas; y legalizadas por dos técnicos municipales-, que los domingos procedían a “legalizar” las ocupaciones y edificaciones posteriores. De aquellos polvos vieron estos lodos. Pero el largo período de “inacción” ¿estaba justificado? Todos votamos acríticamente a favor.
De los años 70 han quedado muchos desmanes y solares vallados sin uso; otro símbolo es el cutre Túnel del Gater, lugar de paso obligado que no cumple reglamentaciones legales, y ahí está con sus tubos, carteles, letreros y rincones obscuros, esperando… De los 90 quedan edificios inacabados y un cuartel por permutar y unir dos barrios céntricos.
Seguí en mi paseo y reflexión solitaria cuando delante de las ruinas tipo Alepo del Ateneo vi una extraña cabaña que me confirmó que ya cerrado el matadero y desolado el otrora próspero Ateneo, habrá que esperar un milagro para tener antes del final del S.XXI un teatro público.
Tras el fiasco, recibí una alegría, la Parroquia de S. Baldiri estaba techando su goteroso techo ¿habría caudales para arreglar el ruinoso teatro anexo?
Pase rápido por la calle S. Pere y su villa (patrimonio artístico) desarbolada y con pancartas rojas, reclamando contenedores.
Me calmé pero desistí de pasear más por el barrio Centro porque tenía la moral baja y me prometí que si mi- idea de “resurrección”- de nuestra ciudad se acometía, yo subiría a S. Ramón a poner un cirio de cera de abeja a nuestro santo. La idea era constituir un “task force” o fuerza operativa con gentes de relieve relacionadas actualmente o en el pasado con nuestra ciudad y constituido el temario de asuntos pendientes de urgente solución: todos ellos aconsejarán medidas aplicativas en el corto plazo.
Suspiré y pensé en un experto legal y contable con experiencia política: Sr. Alfred Albiol Paps, un experto agrícola, Sr. Isidro Ros del Círculo S. Isidro, Sr. Sebastián Mateu, arquitecto exiliado en Madrid, el Sr. Andrés Cuartero, experto en emergencias y protección civil, los Hnos. Crivero dueños de un pool de restauración, el Sr. Angel Velasco, industrial de pastelería (turrones Vicens), el Sr. Esteller, investigador, el Sr X. Guix psicólogo y “coacher”, el Sr. A. Murga, actor, el Sr. Luis Parés contratista y tantos otros que pensé que consultados por las redes y reunidos de tiempo en tiempo, podrían contribuir a solucionar nuestros sempiternos problemas que aún con 37 años en el poder los socialistas nos tenían que resolver todavía.
Algunos seguro, no tendrían inconveniente en acompañar a nuestra alcaldesa a una entrevista, por fin con el ministro Serna, para hablar de las obras del 1992 aún no acabadas, me refiero a la carretera C-245 que nos aíslan en lugar de comunicarnos. La idea era fácil y barata, y seguro que se podría contar con los Hnos. Gassol.
¡Buen año 2017!
Olga Puertas, concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Sant Boi